diumenge, 3 de maig del 2009

Detenida por dejar sola a su hija de 3 años

La mujer abandonó de noche a la niña en el piso para ir a fiestas de Lutxana, donde participó en una trifulca

La Ertzaintza detuvo ayer a una mujer por haber abandonado a su hija de tres años en su casa del barrio de Llano, en Barakaldo. Los agentes tuvieron que alertar a los Bomberos para poder acceder a través de una escalera a la vivienda donde permanecía la pequeña, quien, al parecer, podría haberse quedado sola en el piso desde las dos de la madrugada mientras la madre estaba fuera. «Cuando la niña se cansó, la llevó a casa y ella volvió a salir», afirmaron testigos del suceso.

Este fin de semana la localidad celebra las fiestas de Lutxana y cerca del lugar se había habilitado una zona de barracas donde, según explicaron las mismas fuentes, la mujer «estuvo bebiendo».
La detención se produjo a mediodía, después de que los Bomberos entrasen en la casa donde se hallaba la menor y comprobaran que se encontraba bien. Esta intervención policial no fue la primera en que estuvo implicada la mujer, que unas horas antes -sobre las seis y media de la mañana- tuvo su primer encuentro con los agentes cuando se vio implicada en una trifulca junto a tres hombres. «Tenía heridas en la cara como si la hubieran pegado, pero también se había defendido y había partido una botella de cerveza en la cabeza de otra persona», afirmaron los testigos.


Llamada de los vecinos
Mientras tanto, la pequeña estaba sola en casa, algo de lo que se percataron los vecinos del inmueble desde primera hora de la mañana. De hecho, fueron ellos quienes alertaron a la Policía después de que la madre de la menor les dijera que había perdido las llaves y no podía entrar en el piso.

En el bloque donde vive la mujer detenida la noticia causó un gran revuelo, aunque algunos residentes sospechaban que no era la primera vez que la menor se quedaba desatendida. «Creemos que ya había dejado a la niña en casa antes», reconoció un vecino del portal que prefirió no dar su nombre. «Alguna vez la habíamos visto a ella por la calle y habíamos oído a su hija dentro de casa», argumentaron.

Los propietarios de esas viviendas también reconocieron que, a pesar de todo, la mujer «nunca» había protagonizado un escándalo ni había tenido problemas con la comunidad. «Lleva algo menos de un año viviendo de alquiler aquí y es una persona normal, a la que saludábamos», indicaron. Lo mismo aseguraban de la niña: «Es muy simpática y se la ve sana», advirtieron.

Tras la detención de la mujer, que vivía sola en la casa con pequeña, la menor fue llevada con su padre y se alertó a los servicios sociales para que se hagan cargo del caso.